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miércoles, 28 de mayo de 2014

UN TAXI ARRASTRA A UN INDIVIDUO EN UN FORCEJEO POR EL CENTRO DE MADRID

Son las 3 de la madrugada y un vecino de la zona centro de Madrid graba uno de los altercados que ocurren con frecuencia en las calles que conducen a la Puerta del Sol. En esta ocasión se trata de un taxista que “estaba recogiendo mercancía de un camello”, según explica el residente de la Calle Carmen, J.A. El autor del vídeo afirma que “los ruidos y gritos son una constante que impiden que las personas que vivimos aquí podamos descansar por las noches”.

 Un vecino del centro de Madrid graba uno de los incidentes que a menudo se originan en las calles más céntricas de la capital.
Las imágenes muestran como, tras un forcejeo, el conductor arranca el vehículo con la mitad del cuerpo de su interlocutor en el interior. Colgado de la ventanilla, el hombre es arrastrado unos 50 metros hasta que el coche se detiene. La pelea continúa unos segundos más antes de que el taxista de marcha atrás y vuelva a desplazar al individuo con el que discutía, esta vez con la puerta del coche abierta.

El centro, una zona de conflictos
De sobras es conocida la problemática que durante años se lleva sucediendo en la zona centro de la capital. A pesar de la modificación de la Ordenanza de Convivencia Ciudadana en el Espacio Público y del aumento de medidas de seguridad que se han llevado a cabo, el distrito centro de Madrid sigue albergando conflictos relacionados con drogas, alcohol y prostitución, según denuncian vecinos y comerciantes de la zona.
El presidente de la Federación Madrid Centro, Florencio Delgado, reconoce que la presencia de cámaras de vigilancia en la calle Montera ha reducido el número de prostitutas pero que, a su vez, “siguen habiendo problemas porque la prostitución trae consigo peleas de forma frecuente”.

Medidas de seguridad que no son suficientes
Los esfuerzos municipales por frenar hechos de este tipo parece que no son suficientes para erradicar la problemática. En los últimos años se ha aumentado la presencia policial, tanto uniformada como de paisano, así como se han instalado cámaras de seguridad en la calle.  Fuentes del Ayuntamiento de Madrid reconocen ser conscientes de que “hay que seguir trabajando en el distrito a pesar de los dispositivos especiales que se han llevado a cabo”.
Por su parte, los vecinos y comerciantes de la zona consideran que sigue habiendo mucha permisividad, sobre todo en lo relacionado al negocio del sexo, y que “sin una voluntad política para terminar con estos problemas, seguiremos igual”./La Vanguardia

SALUT Y BUEN VIAJE.


 

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