Transportes descarta una votación sobre el tope de 12 horas diarias y un informe de Industria rechaza poner otra vez el reloj en los taxímetros .
Algo más de tres horas de reunión no sirvieron ayer para aclarar muchas cosas acerca del conflicto del taxi. O más bien lo contrario, la conclusión fue que la Conselleria de Infraestructuras no tiene prisa para reparar un conflicto que está desquiciendo al sector y que tiene su origen en la regulación horaria, con la reivindicación de los autónomos de un tope de 12 horas y la libertad total que defienden los empresarios y sus asalariados.
La reunión fue convocada por el director general de Transportes, Carlos Eleno, y acudieron representantes de las principales asociaciones y sindicatos de Valencia. El secretario de Acción Sindical de USO en el sector del taxi, Felipe Bueno, lo resumió diciendo que salía «decepcionado al notar que el director general empieza a recular de lo que nos dijo hace poco».
Con esto se refería a la promesa de una consulta por votación de los 2.800 conductores de Valencia y su área metropolitana acerca del tope horario de 12 horas. Ahora, indicó Bueno, lo único que se podrá votar, en caso de que finalmente se haga, es si se implanta de nuevo el reloj en cada vehículo.
Esto dejaría un amplio margen de decisión a la conselleria, que ha convocado de nuevo a las asociaciones el próximo septiembre. Así las cosas, los autónomos deben decidir si mantienen las movilizaciones previstas los próximos días 22 y 1 de agosto, con el anuncio del bloqueo de las paradas de la estación Joaquín Sorolla y el aeropuerto de Manises.
Eleno acudió con dos informes a la reunión, uno de la Dirección General de Industria y otro de la de Trabajo. La presidenta de la Asociación Empresarial del Taxi, Sonia Viúdez, indicó que el primero descarta por completo la colocación del reloj horario en el taxímetro.
La única opción prevista es añadir en cada coche un aparato similar a un tacógrafo, con un coste estimado de 400 euros. La solución no gustó a ninguna de las partes, pero parece que hay, al menos según el informe de la Generalitat, dificultades técnicas y jurídicas para volver a colocar el reloj como antes.
Las últimas proceden sobre todo de un posible recurso en contra de la regulación. Ayer no hubo acuerdo, pero es que según Viúdez, el documento de Trabajo supuso una jarra de agua fría para los defensores del tope de 12 horas, al entender que prima la libertad de contratación.
«Entonces, han pedido que el tope sea de 16 horas, aunque los de la conselleria no han decidido nada». La postura de los empresarios del sector no ha cambiado y pasa por una jornada de 24 horas, con libertad absoluta para la circulación de los vehículos, que se complementaría con unos turnos de descanso de un día cada tres. De este modo, sostienen, se retirarían de las calles 900 coches cada jornada y se mantendrían todos los puestos de trabajo actuales.
En caso de optar por el tope de 12 horas, indican que peligran medio millar de empleos, mientras que la postura de los autónomos es que la situación actual, sin límite, supone unas pérdidas de 400 euros semanales por la mayor competencia.
El informe de Trabajo no es tan mal visto por Bueno, quien indicó que a su juicio es positivo para establecer el tope de 12 horas, aunque con la fórmula de prestación de un servicio público y no una imposición en material laboral.
En todo caso, estas distintas interpretaciones denotan lo enmarañada que está la cuestión. Los empresarios y asalariados sí que decidieron ayer desconvocar su protesta en la plaza de Manises, al entender que hasta septiembre ya no hay nada que hacer. El problema es que a la vuelta de vacaciones, el problema seguirá sin plazos de solución.
UNA DOCENA DE TAXIS APARECEN CON RUEDAS PINCHADAS EN PLENO CONFLICTO DEL SECTOR
Los empresarios denuncian actos de radicales en una zona de Vara de Quart, mientras los dos colectivos vuelven a las protestas.
El conflicto abierto en el sector del taxi por la regulación horaria ha iniciado una deriva peligrosa con actos vandálicos en vehículos. La presidenta de la Asociación Empresarial del Taxi, Sonia Viúdez, denunció ayer los daños producidos en una docena de coches estacionados en la calle Gremis, todos pertenecientes a empresarios. Ruedas pinchadas, cristales rotos y alguna pintada con espray fue lo que se encontraron los chóferes el domingo a primera hora de la mañana cuando se hizo el cambio de turno.
Los propietarios ya han denunciado los hechos en la comisaría. Juan Pardo, uno de los afectados, es propietario de tres vehículos y ayer mismo realizó el trámite. Aseguró que «los radicalismos y las agresiones no me parecen bien», por lo que pidió a los autores que tengan en cuenta que este tipo de daños «impide a los taxistas que trabajen y puedan dar de comer a sus familias».
Viúdez comentó que el lugar elegido para estropear los coches es una zona habitual de estacionamiento de taxis, dado que justo enfrente están las instalaciones de una cooperativa del sector. «Está la gasolinera, por lo que lo normal es dejar el coche particular y coger el taxi, que ha dejado antes el compañero».
La presidenta destacó que el denominador común de todos los vehículos afectados es que son de empresarios, por lo que dijo que «creo que pueden ser radicales de un sindicato», aunque afirmó que no han podido constatar nada todavía a través de cámaras de grabación. Esa es una de las gestiones que se realizan estos días, aunque la dirigente adelantó que pedirán a los responsables de la cooperativa la posibilidad de enfocar las cámaras de vigilancia a la calle para aumentar la seguridad de vehículos y conductores. Por su parte, el secretario general de Acción Sindical de USO, Felipe Bueno, negó cualquier vinculación de su sindicato con estos hechos y dijo que son fruto de radicales y la «tensión, que ha aumentado cada día».
El origen del enfrentamiento entre taxistas autónomos y los empresarios y asalariados tiene su origen en la derogación de la orden de la Generalitat que regula los horarios y los descansos semanales en el sector. El motivo fue un recurso interpuesto en el Tribunal Superior de Justicia por la Asociación Empresarial, al entender que era lesivo para sus intereses y los de todo el sector un tope de 12 horas al día.
Desde la derogación, el límite horario en el taxímetro fue anulado, manteniéndose sólo los descansos semanales. Mientras que los autónomos aseguran que sufren pérdidas de 400 euros semanales con esta situación, los empresarios aseguran que de ponerse en práctica de nuevo el reloj en los taxímetros, el sector registraría medio millar de despidos por la falta de trabajo.
Bueno indicó que los incidentes ocurridos en la calle Gremis el pasado domingo no han sido los únicos. En el camino de Moncada y la calle Conde de Lumiares aparecieron hace dos semanas sendos taxis con las ruedas pinchadas y el módulo del techo destrozado.
En todo caso, aseguró que se trata de «incidentes aislados», por lo que quiso quitar importancia y deseó que la Conselleria de Infraestructuras tome ya una decisión sobre la orden que emitirá. Los dos colectivos han vuelto a realizar concentraciones en la plaza de Manises, para requerir a la Generalitat que tome cartas en el asunto.
En ambos casos, la intención es quedarse al raso hasta que se anuncie una decisión. Los autónomos abogan por la convocatoria de una consulta en el sector, lo que implicaría la votación de 2.800 chóferes. Tanto USO como la Federación Sindical del Taxi y la Asociación de Taxistas de la Comunitat están convencidos de que ganarán en las urnas porque recogieron 1.500 firmas en una movilización reciente a favor del límite de 12 horas en la jornada diaria. El problema es que cualquier orden será objeto con seguridad de un recurso en los tribunales y con el precedente de la derogada, la conselleria no quiere adelantarse sin tener el pleno respaldo de la Abogacía de la Generalitat.
Los autónomos han convocado actos de protesta el día 22 en la estación Joaquín Sorolla y el 1 de agosto en el aeropuerto de Manises. La intención es bloquear las paradas en caso de que persista esta situación. Por parte de los empresarios, Viúdes reiteró que su petición pasa por jornadas libres de 24 horas y descansos rotatorios cada tres días para evitar la pérdida de empleos./Las Provincias
SALUT Y BUEN VIAJE.
No hay comentarios:
Publicar un comentario